El cocktail tuvo lugar en el hall del auditorio del Museo de Bellas Artes de Bilbao. Para nosotros fue todo un placer ver a nuestras pequeñas obras de arte efímeras rodeadas de grandes artistas. Fue la primera vez que mostramos este tipo de centros en el que el cristal se utiliza como soporte no como contenedor de flores y en su interior solo una vela flotante.